Este espacio está dedicado a aquellas personas que han estado o están vinculadas con el rock andaluz desde distintas facetas profesionales (artística, empresarial, periodística...) o simplemente por su relación personal y aportación a estas músicas (coleccionistas, seguidores destacados...). Esperamos, de esta forma, dar su sitio y de alguna forma hacer justicia a todos los que han hecho o hacen algo por el rock andaluz.
Máximo Moreno comparte sus vivencias con Arabiand Rock
28/08/2011
Máximo Moreno es uno de los mejores ilustradores de discos que hay en nuestro país. Ha realizado famosas portadas para Camarón, Lole y Manuel, Alameda, Granada, Daniel Vega, Gualberto, Hilario Camacho, Paco de Lucía, Miguel Ríos, Triana y un largo etcétera.
Arabiand rock, consciente de la importancia de este artista sevillano, que ha sabido acoplar perfectamente su obra para muchos discos que han marcado nuestra historia, se desplazó hasta su estudio en el barrio sevillano de Los Remedios para conversar con él y conocer de primera mano su arte.
Arabiand rock, consciente de la importancia de este artista sevillano, que ha sabido acoplar perfectamente su obra para muchos discos que han marcado nuestra historia, se desplazó hasta su estudio en el barrio sevillano de Los Remedios para conversar con él y conocer de primera mano su arte.
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¿Cómo fueron tus comienzos en la pintura?
“Después de la mili, con 21 años me fui a Madrid y allí estuve quince años. Fue donde realicé con más intensidad mi trabajo como portadista de discos. Me fui a Madrid para estudiar cámara de cine y allí fue donde conocí a Gonzalo García-Pelayo, cuando él terminaba dirección de cine. Cuando cerraron la escuela de cine. Trabajé durante tres años en el Servicio Nacional de Restauración. Allí aprendí muchas técnicas de fotografía, encuadernación, restauración de pergaminos, etc.”
¿Cuándo comenzaste a hacer portadas de discos y cuál fue la primera que realizaste?
“Mi conexión con las portadas de discos, llegó a través de mi hermano Josele que estaba en Los Payos y cuando grababan en los estudios de Hispavox pues yo iba por allí y vio mis dibujos Armando que era el diseñador del sello. Le gustó mucho mi trabajo y me encargó una primer aportada que era para Miguel Ríos y su disco -Memorias de un ser humano-. Ese fue mi primer trabajo con dibujo para discos, ya que antes había hecho alguna para Smash, pero era con fotografías.”
“Después de la mili, con 21 años me fui a Madrid y allí estuve quince años. Fue donde realicé con más intensidad mi trabajo como portadista de discos. Me fui a Madrid para estudiar cámara de cine y allí fue donde conocí a Gonzalo García-Pelayo, cuando él terminaba dirección de cine. Cuando cerraron la escuela de cine. Trabajé durante tres años en el Servicio Nacional de Restauración. Allí aprendí muchas técnicas de fotografía, encuadernación, restauración de pergaminos, etc.”
¿Cuándo comenzaste a hacer portadas de discos y cuál fue la primera que realizaste?
“Mi conexión con las portadas de discos, llegó a través de mi hermano Josele que estaba en Los Payos y cuando grababan en los estudios de Hispavox pues yo iba por allí y vio mis dibujos Armando que era el diseñador del sello. Le gustó mucho mi trabajo y me encargó una primer aportada que era para Miguel Ríos y su disco -Memorias de un ser humano-. Ese fue mi primer trabajo con dibujo para discos, ya que antes había hecho alguna para Smash, pero era con fotografías.”
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¿Qué hiciste después de la portada de Miguel Ríos?
“Después del disco de Miguel Ríos empecé a colaborar haciendo muchas portada de flamenco (Lole y Manuel, Camarón, Paco de Lucía, El Piqui, Tía Nica La Piriñaca, Los Chunguitos…). Con Gonzalo hice muchas portadas para el sello Gong (Triana, Granada, Gualberto, Daniel Vega…) y también para CBS con Alameda (tres portadas) y algunas portadas más.”
¿Cuándo fue tu regreso a Sevilla?
“Pues yo volví a Sevilla en el año 1981.Al llegar comencé a preparar una exposición de dibujos. Hice el cartel oficial de las fiestas de primavera de Sevilla de 1982. También hice una exposición con 30 cuadros en la Galería Melchor. Pedí un préstamo, vendí poco y lo pasé muy mal. Sevilla es una ciudad muy complicada!”
“Después del disco de Miguel Ríos empecé a colaborar haciendo muchas portada de flamenco (Lole y Manuel, Camarón, Paco de Lucía, El Piqui, Tía Nica La Piriñaca, Los Chunguitos…). Con Gonzalo hice muchas portadas para el sello Gong (Triana, Granada, Gualberto, Daniel Vega…) y también para CBS con Alameda (tres portadas) y algunas portadas más.”
¿Cuándo fue tu regreso a Sevilla?
“Pues yo volví a Sevilla en el año 1981.Al llegar comencé a preparar una exposición de dibujos. Hice el cartel oficial de las fiestas de primavera de Sevilla de 1982. También hice una exposición con 30 cuadros en la Galería Melchor. Pedí un préstamo, vendí poco y lo pasé muy mal. Sevilla es una ciudad muy complicada!”
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¿Qué estás haciendo ahora?
“Estoy haciendo muchos retratos y pinturas de personajes peculiares. Pinto a personas escenificas en distintos motivos populares: la fiesta de los toros, la Semana Santa, elementos de cocina, etc. Está la cosa muy complicada para vender pintura.”
De toda tu trayectoria artística ¿tienes más satisfacciones o sinsabores?
“Tengo muchos sinsabores de toda mi vida porque en general la vida tiene cuatro cosas buenas y mucho sacrificio. Esta profesión no está valorada. Las casas de discos eran exprimidoras. Había que trabajar rápido, de noche… y estaba muy mal pagado. He sido valorado por la gente de la calle, pero mi ilusión siempre ha sido vivir de mi trabajo y no lo he podido conseguir. En este país el dinero se lo llevan siempre los mismos. Hay muchos “mangantes”. Es una pena porque al final trabajamos cabreados.”
¿Qué opinas del rock andaluz?
“Yo suelo escuchar música clásica y algo de jazz. El rock lo escuchaba cuando estaba en Madrid. Escuchaba a Frank Zappa, King Crimson… Tengo muchos vínculos con el rock andaluz y el flamenco, pero la verdad es que no lo escucho ahora. No tengo una música definida, pero tengo muchos recuerdos de aquellos años. Yo iba a los estudios de grabación, a los conciertos… y me sentía muy bien con los músicos.”
“Estoy haciendo muchos retratos y pinturas de personajes peculiares. Pinto a personas escenificas en distintos motivos populares: la fiesta de los toros, la Semana Santa, elementos de cocina, etc. Está la cosa muy complicada para vender pintura.”
De toda tu trayectoria artística ¿tienes más satisfacciones o sinsabores?
“Tengo muchos sinsabores de toda mi vida porque en general la vida tiene cuatro cosas buenas y mucho sacrificio. Esta profesión no está valorada. Las casas de discos eran exprimidoras. Había que trabajar rápido, de noche… y estaba muy mal pagado. He sido valorado por la gente de la calle, pero mi ilusión siempre ha sido vivir de mi trabajo y no lo he podido conseguir. En este país el dinero se lo llevan siempre los mismos. Hay muchos “mangantes”. Es una pena porque al final trabajamos cabreados.”
¿Qué opinas del rock andaluz?
“Yo suelo escuchar música clásica y algo de jazz. El rock lo escuchaba cuando estaba en Madrid. Escuchaba a Frank Zappa, King Crimson… Tengo muchos vínculos con el rock andaluz y el flamenco, pero la verdad es que no lo escucho ahora. No tengo una música definida, pero tengo muchos recuerdos de aquellos años. Yo iba a los estudios de grabación, a los conciertos… y me sentía muy bien con los músicos.”
TRIANA:
Máximo Moreno comenta sus tres primeros elepés
El Patio
El patio que se recoge en la portada estaba en San Pedro (Sevilla), al lado de la Alfalfa. Era uno de los últimos corrales. Eran los típicos patios sevillanos de toda la vida. La señora de la izquierda era Dolorcita, una mujer que vivía allí junto a otras tres señoras mayores. Los dueños no restauraban la casa provocando que se fuera deteriorando para que se fueran las señoras de allí.
Este patio era del centro de Sevilla, no tenía nada que ver con los patios o corrales del barrio de Triana. Los del centro eran más grandes y vivía más gente. No había ni cuarto de baño. Se lavaban en barreños.
Yo hice un reportaje fotográfico y de esas fotos salieron mis dibujos.
Comencé haciendo la parte izquierda de la portada, donde aparece la señora. Cuando estaba haciéndola murió mi padre y me afectó muchísimo, pero no pude parar de pintarla. O sea, que la parte izquierda la hice en Madrid y la parte derecha en Sevilla cuando vine por el fallecimiento de mi padre. Lo que pasa es que, por mi estado de ánimo, la parte derecha, que hice a continuación, fue más oscura y con semblanzas de mi padre, quien aparece asomado a una ventana, tras Jesús de la Rosa, junto a una corona colgada en la pared. Esta parte del dibujo está llena de fantasmas (nazarenos, caras ocultas…). Es como una decadencia. Hice el dibujo mientras lloraba.
A los músicos los puse vestidos con esos trajes que usaban entonces. Eran ropas muy “horteras” (como Bee Gees).
Este patio era del centro de Sevilla, no tenía nada que ver con los patios o corrales del barrio de Triana. Los del centro eran más grandes y vivía más gente. No había ni cuarto de baño. Se lavaban en barreños.
Yo hice un reportaje fotográfico y de esas fotos salieron mis dibujos.
Comencé haciendo la parte izquierda de la portada, donde aparece la señora. Cuando estaba haciéndola murió mi padre y me afectó muchísimo, pero no pude parar de pintarla. O sea, que la parte izquierda la hice en Madrid y la parte derecha en Sevilla cuando vine por el fallecimiento de mi padre. Lo que pasa es que, por mi estado de ánimo, la parte derecha, que hice a continuación, fue más oscura y con semblanzas de mi padre, quien aparece asomado a una ventana, tras Jesús de la Rosa, junto a una corona colgada en la pared. Esta parte del dibujo está llena de fantasmas (nazarenos, caras ocultas…). Es como una decadencia. Hice el dibujo mientras lloraba.
A los músicos los puse vestidos con esos trajes que usaban entonces. Eran ropas muy “horteras” (como Bee Gees).
Hijos del Agobio
Este fue un cuadro grande que hice y que formaba parte de una trilogía. Se completaba con Los Jinetes del Apocalipsis, que use para el disco de Daniel Vega “La noche que precede a la batalla”. Se personificaban la guerra, el hambre y la muerte. Era una etapa en la que pintaba con aires surrealista, con las tierras con grietas y personajes extraños. Mezclaba insignias nazis, armas de guerra, con elementos de la nobleza y los poderes.
Hijos del Agobio representa al infierno. El hombre con barba es el diablo, que está protestando de todo lo que llega. Entre los personajes que llegan al infierno puse al señorito andaluz, mujeres folklóricas, el militarista con botas, manos de serpiente y cara de hipopótamo…También están reprensados otros personajes, como los idólatras de su cuerpo, el traidor, el canalla, el rey…
Todo se muestra en una escalera de descomposición. La idea fue mía, tanto de la pintura como del nombre, e incluso la letra de uno de los temas. Y el título “Hijos del agobio”.
El tema me surgió estando en Madrid con la transición política. Todo era un agobio. Eran años en los que las calles estaban tomadas por la Guardia Civil, había muchas manifestaciones, el trabajo era excesivo y se cobraba mal, todo el mundo estaba agobiado y sin dinero.
Hijos del Agobio representa al infierno. El hombre con barba es el diablo, que está protestando de todo lo que llega. Entre los personajes que llegan al infierno puse al señorito andaluz, mujeres folklóricas, el militarista con botas, manos de serpiente y cara de hipopótamo…También están reprensados otros personajes, como los idólatras de su cuerpo, el traidor, el canalla, el rey…
Todo se muestra en una escalera de descomposición. La idea fue mía, tanto de la pintura como del nombre, e incluso la letra de uno de los temas. Y el título “Hijos del agobio”.
El tema me surgió estando en Madrid con la transición política. Todo era un agobio. Eran años en los que las calles estaban tomadas por la Guardia Civil, había muchas manifestaciones, el trabajo era excesivo y se cobraba mal, todo el mundo estaba agobiado y sin dinero.
Sombra y Luz
Esta portada es una historia gráfica. Aquí ya no hay tanta conceptualidad. Una vez que el grupo Triana ya está asentado de lo que se trata es de plasmar la imagen del grupo, consolidando la vela, que es el hilo conductor desde el principio.
La vela la puse quemando la portada. “Sombra y luz” es una portada más sencilla, sin tantos personajes como en las anteriores. Gustó mucho por su elegancia. En el interior incluí un cuadro con el callejón de la Plaza de Santa Marta, junto a la Giralda, con los retratos de los tres músicos. Si nos fijamos en esa pintura, a la derecha hay una ventana donde aparece otro personaje misterioso, para seguir con imagen de la trilogía de “El Patio” e “Hijos del agobio”.
Le puse el nombre de “Sombra y luz” inspirándome en el ying y el yang, es como el éxito y el fracaso. En la parte delantera estaba la vela recién encendida y en la parte trasera aparece la vela consumida y todo quemado.
La vela la puse quemando la portada. “Sombra y luz” es una portada más sencilla, sin tantos personajes como en las anteriores. Gustó mucho por su elegancia. En el interior incluí un cuadro con el callejón de la Plaza de Santa Marta, junto a la Giralda, con los retratos de los tres músicos. Si nos fijamos en esa pintura, a la derecha hay una ventana donde aparece otro personaje misterioso, para seguir con imagen de la trilogía de “El Patio” e “Hijos del agobio”.
Le puse el nombre de “Sombra y luz” inspirándome en el ying y el yang, es como el éxito y el fracaso. En la parte delantera estaba la vela recién encendida y en la parte trasera aparece la vela consumida y todo quemado.
